Afecta aproximadamene al 50% de la población mundial, esta se adquiere típicamente en la infancia. Algunos estudios sugieren que hasta los 6 años de edad, los niños pueden infectarse y curar la infección espontáneamente, pero a partir de los 8 años, los niños suelen desarrollar una infección crónica.
Esta bacteria tiene una relación causal con el linfoma asociado a mucosas (MALT) y con la úlcera gastroduodenal, al tiempo que posee una reación asociativa en patologías como dispepsia funcional, gastritis y adenocarcinoma gástrico.
Las pruebas diagnósticas para detectar la infección por Helicobacter pylori incluyen métodos endoscópicos y no endoscópicos. Las técnicas utilizadas pueden ser directas (cultivo, demostración microscópica del microorganismo) o indirectas (utilizando ureasa, antígenos fecales o una respuesta de anticuerpos como marcador de enfermedad).
La elección del examen depende en gran medida de la disponibilidad y el costo; además hay que distinguir
El tratamiento erradicador de Helicobacter pylori ha supuesto una auténtica revolución
en la gastroenterología al permitir no solamente la cicatrización de la úlcera péptica,
sino su curación definitiva.
Entre las diferentes terapias de tratamiento están la terapia triple estándar constituida por un inhibidor de bomba de protones y dos antibióticos (amoxicilina o claritromicina o metronidazol), con la cual se logran una tasa de erradicación superior al 80%.
Referencias
1. D.Y. Graham. Therapy of Helicobacter pylori: Current status and issues. Gastroenterology, 118 (2010), pp. S2-S8.
2. Sierra F, Forero JD, Rey M. Tratamiento ideal del Helicobacter pylori: una revisión sistemática. Rev Gastroenterol Mex 2014;79:28-49